13 de febrero de 2020
Que los videojuegos sean solo cosas de jóvenes es una creencia que cada día va quedando más relegada al pasado. Los indicadores más actuales apuntan a un gran número de personas que encuentran en el juego una diversión o mero entretenimiento y también una manera de aprender y adquirir habilidades. Las últimas tendencias relacionadas con el e-learning han encontrado en la gamificación una manera de acercar la educación a los estudiantes, además de emplearla para crear contenidos atractivos, divertidos y que facilitan la adquisición de conocimientos.
La gamificación, como parte del proceso de digitalización de los contenidos didácticos, es una oportunidad que muchos centros educativos y de educación online están desarrollando. Los resultados hacen posible que muchas disciplinas y metodologías se hayan adaptado a los nuevos tiempos y que los contenidos puedan aplicarse de una forma más práctica. A lo anterior, hay que añadir la posibilidad de estudiar y generar trabajos colaborativos en línea favoreciendo la relación entre docentes y estudiantes.
Otro aspecto destacable de la gamificación como complemento del e-learning es la estimulación dirigida al alumnado, prestando atención al esfuerzo y haciendo que este resulte motivador. El entusiasmo crece a través de la superación de niveles o al adquirir determinada puntuación si superan retos establecidos como actividades interactivas y trabajos que van desbloqueando nuevos desafíos. La retroalimentación de cada nivel, por parte del profesorado, contiene un valor importante en este tipo de metodologías, porque los docentes pueden personalizar los feedbacks y hacerlos llegar a través de comentarios detallados sobre observaciones y valoraciones apropiadas atendiendo, de esta manera, a cada uno de los alumnos.
Por último, para que el resultado sea efectivo y la jugabilidad pueda ser una verdadera experiencia virtual es recomendable recurrir a empresas especializadas en este tipo de productos. En la mayoría de los casos son juegos adaptados a cualquier tipo de dispositivos, a partir de aplicaciones independientes o incorporadas a las mismas plataformas de enseñanza online. Es recomendable, además, la incorporación de esta metodología educativa como parte de una buena estrategia de marketing que potencie la herramienta, el valor de marca y el reclamo hacia los alumnos.
El experto en tecnología educativa, Julián Martín, asegura que la gamificación “potencia el engagement”. Martín especifica que estas metodologías “son técnicas de psicología conductista que favorecen la repetición de ciertas conductas por parte de los sujetos. En este caso contribuye a que los estudiantes vuelvan una y otra vez. El éxito de la implantación de la gamificación se puede medir a través de un curso del que ya tenemos unos datos de permanencia de los estudiantes y, al aplicarle técnicas de gamificación, medir después la permanencia de los alumnos y comprobar cuánto han mejorado”.